Doc.-12-. Adjunto 5º. Crónicas de Jerónimo Zurita.
Jerónimo Zurita. La traza que tuvo la reina para estar con el rey, que no hacía vida con ella. Estaba la reina lo más del tiempo en Mompeller; y las veces que el rey iba allá no hacía con ella vida de marido y muydisolutamente se rendía a otras mujeres porque era muy sujeto a aquel vicio. Sucedió que estando en Miraval la reina y el rey don Pedro en un lugar allí cerca junto a Mompeller que se dice Lates, un rico hombre de Aragón que se decía don Guillén de Alcalá, por grandes ruegos e instancia llevó al rey a donde la reina estaba, con promesa, según se escribe, que tenía recabado que cumpliría su voluntad una dama de quien era servidor, y en su lugar púsole en lacámara de la reina: y en aquella noche que tuvo participación con ella quedó preñada de un hijo, el cual parió en Mompeller en la casa de los de Tornamira en la víspera de la purificación de Nuestra Señora del año 1207.
Capitulo CI.
Párrafo 2.
Herencia del infante don Jaime. Y porque conocía cuán dudosa era la fe y amistad entre los
hermanos en quien quedaba el reino dividido, y no veía señales de mucho amor y hermandad
entre él y el infante don Jaime su hermano -a quien debaja heredado en el reino de Mallorca y en
las islas adyacentes y en el condado y señorío de Rosellón y Mompeller-, encargóle
encarecidamente que le amase y honrase y se contentase con la principal y mejor parte que le
dejaba de sus reinos. Y encomendóle que favoreciese a don Jaime Roca obispo de Huesca, su
canciller, a quien él había criado desde su niñez, y al sacristán de Lérida su hermano, y a Hugo de
Mataplana arcediano de Urgel y a todos los de su casa y consejo; y que los tuviese cabo su
persona y se rigiese y gobernase mediante su parecer.
Capitulo XXVI
De las cortes que el Rey tuvo en Monzón. (Jaime I)
Confirmación de la moneda jaquesa. Y particularmente se ordenó que el rey asegurase el valor de
la moneda jaquesa que entonces corría y confirmóla para que siempre fuese de aquel mismo valor
y peso y tuviese la misma ley. Y fue determinado que en todos los lugares donde corría que era en
el reino de Aragón hasta comprender las ciudades de Lérida y Tortosa y su tierra, jurasen todos
desde catorce años arriba que con todo su poder procurarían que aquella moneda se guardase y
corriese.
Conquista de Valencia Zurita
Que el Rey Zaen rindió la ciudad de Valencia a partido.
Dos caballeros moros requirieron a otros dos del ejército a justa, y los que salieron y lo que
sucedió. En este medio, por querer mostrar los de dentro que aún tenían ánimo para defenderse,
salieron dos caballeros moros a vista de nuestro campo y requirieron que saliesen otros dos del
ejército a correr algunas lanzas. Y don Jimen Pérez de Tarazona que fue después señor de
Arenós, suplicó al rey le hiciese merced de le dar licencia que saliese a ellos con un caballero que
se decía Miguel Pérez de Isuerre, y el rey quiso estorbar que no saliese; y díjole que se
maravillaba cómo pidiese tal cosa un hombre tan pecador como él y de tan mala vida, y que tenía
temor que quedase con vergüenza. Y porque le importunó sobre ello, lo hubo de permitir, y salió
contra el moro, el cual derribó del encuentro a don Jimen Pérez. Y contra el otro salió Pedro de
Clariana; y arremetiendo para encontrarse antes del encuentro, el moro volvió las espaldas y Pedro
de Clariana le fue siguiendo hasta que pasó el río y se recogió a los suyos
Zurita capítulo LXXX Libro II.
Quién era don Pedro y sus cosas. Era don Pedro Ahones, sin ser de linaje de ricos hombres, de
los más grandes y poderosos del reino; y tenía la villa de Bolea y todo Sobrarbe que el rey don
Pedro le había empeñado. Y estaba apoderado no sólo de las fuerzas y castillos de la montaña,
pero de algunas otras.
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